Vértigos
HISTORIAL
Paciente varón de 32 años, trabaja de operario de grúa. Acude por un vértigo que empezó justo en el cambio de primavera (la época más frecuente de los vértigos). El paciente piensa que es por su trabajo, ya que mira todo el rato hacia arriba, y nota como se le va cargando la nuca conforme va pasando el día.
ANAMNESIS
Preguntamos si ya tiene vértigos cuando se levanta, dice que los siente desde que se levanta de la cama y refiere que se le agudizan conforme va trabajando y avanza el día. Esto significa que podemos descartar el tema ocular, ya que si le ocurre recién levantado no puede ser de los ojos, ya que de noche no trabajan. También le pregunto si anímicamente está en un buen momento y dice que bien pero no me convence, por lo que insisto. Me cuenta que no se siente cómodo en su relación de pareja y que quiere separarse de ella, y la situación se ve agrabada porque al mismo tiempo su pareja desea tener un bebé.
TRATAMIENTO
Hacemos una estiramiento del raquis occipital al mismo tiempo que trabajamos la zona del cardias, y estimulamos el estómago e hígado. Le explico al paciente que además de estar siempre mirando hacia arriba por su trabajo de operario de grúa, le ocurre que no es capaz de digerir la situación con su pareja, porque no se atreve a explicar lo que le pasa, y esa indecisión se está revolviendo en el estómago.
Lo que ocurre es que el estómago está unido a las dorsales superiores cervicales y occipital a través de una fascia que se llama periesofágica. La tensión del estómago y el cardias tensa el esófago, que a su vez tira del cráneo impidiendo la libre circulación de sangre. Esto causa que la presión intracraneal se desajuste y provoque esta inestabilidad, sumado a su trabajo de operario de grúa, tenemos todos los elementos para que produzca un vértigo. Nosotros como terapeutas nos encargamos de recuperar la parte física, y ayudamos a que el paciente sea capaz de tomar una decisión con su pareja para que así el sistema se recupere.
Los vértigos de primavera suelen estar asociados a estómago e hígado. Quien no sabe el dicho “la primavera la sangre altera”. Al recibir más horas de luz, la piel es estimulada, la circulación aumenta y el reservorio principal de sangre es el hígado.
¿A quién no le cuesta tomar decisiones?